Todo en la vida cambia. Desde el baile check to cheek (mejilla a mejilla) que se bailaba en los años 4
0’, hasta la famosa micro “matadero palma” que tomaba mi abuelita, la cual
fue reemplazada por el problemático Transantiago. Los cambios también llegaron a las comunicaciones. En la actualidad vemos niños de 5 o 6 años chateando o buscando información para hacer sus tareas, abuelitos que ni en su mejor sueño se imaginaron hablando por teléfono en las calles o incluso sacando fotos con el mismo celular.
Pero eso no es todo. Los nuevos medios de comunicación como Internet, han permitido a la gente “jugar al periodista”, ya que muchas veces es el propio ciudadano quien ha dado a conocer hechos noticiosos. Ejemplos hay muchos, uno de los últimos recordados es el famoso video “wena Naty
”, que mostró una realidad de la juventud de nuestro país. Para eso no se necesitó un periodista ni nadie que haya pasado por la universidad, sino una cámara y un ciudadano común y corriente. 
Por esta misma razón hay que comenzar a repensar en las habilidades del periodista. Ya no se necesitan sólo las destrezas del típico reportero de un diario, sino que a ellas hay que sumarle la disposición de aprender cosas nuevas, habilidades multitarea y por sobre todo el trabajo en equipo, así se logrará la habilidad para “pensar digital”
Pero todo esto debe ir acompañado por la enseñanza que se da en las universidades. Éstas deberían salir de la caja en la cual han estado insertas por tantos años y entregar a sus alumnos herramientas para desempeñarse en todas las áreas de la comunicación. Así se abrirán fronteras y el futuro periodista será un profesional completo, uno apto para todos los sectores, incluyendo Internet. El periodista que se necesita en el siglo XXI.
0’, hasta la famosa micro “matadero palma” que tomaba mi abuelita, la cual
fue reemplazada por el problemático Transantiago. Los cambios también llegaron a las comunicaciones. En la actualidad vemos niños de 5 o 6 años chateando o buscando información para hacer sus tareas, abuelitos que ni en su mejor sueño se imaginaron hablando por teléfono en las calles o incluso sacando fotos con el mismo celular.Pero eso no es todo. Los nuevos medios de comunicación como Internet, han permitido a la gente “jugar al periodista”, ya que muchas veces es el propio ciudadano quien ha dado a conocer hechos noticiosos. Ejemplos hay muchos, uno de los últimos recordados es el famoso video “wena Naty
”, que mostró una realidad de la juventud de nuestro país. Para eso no se necesitó un periodista ni nadie que haya pasado por la universidad, sino una cámara y un ciudadano común y corriente. Por esta misma razón hay que comenzar a repensar en las habilidades del periodista. Ya no se necesitan sólo las destrezas del típico reportero de un diario, sino que a ellas hay que sumarle la disposición de aprender cosas nuevas, habilidades multitarea y por sobre todo el trabajo en equipo, así se logrará la habilidad para “pensar digital”Pero todo esto debe ir acompañado por la enseñanza que se da en las universidades. Éstas deberían salir de la caja en la cual han estado insertas por tantos años y entregar a sus alumnos herramientas para desempeñarse en todas las áreas de la comunicación. Así se abrirán fronteras y el futuro periodista será un profesional completo, uno apto para todos los sectores, incluyendo Internet. El periodista que se necesita en el siglo XXI.
